En biología las especies se extinguen. La sociedad humana, la política, la economía o las empresas, acaban tarde o temprano fracasando si no se renuevan. En tecnología continuamente nos cansamos de que las cosas nos fallen, se estropeen, muchas veces, sin motivo aparente.
Si según dicen muchos expertos biólogos, la evolución de las especies es en gran medida aleatoria y tiende a que haya extinciones sin razón clara, sabiendo que la naturaleza es sabia, por qué no va a fallar infinidad de aparatos construidos por el hombre?.
Un día la televisión deja de funcionar. No le hemos dado un golpe, no se ha caído al suelo ni se ha mojado. Simplemente un día deja de funcionar. ¿Por qué ocurre? Más allá del análisis del técnico, esto ocurre por una razón de simetría. Los materiales tienen distintas propiedades. Así, el cobre es buen conductor de la electricidad mientras el plástico no y el diamante es más duro que el cuarzo. Las propiedades de los materiales dependen en gran medida de la simetría de éstos. Es decir, de cómo estén situados los átomos en la estructura global del material. Los cables que forman los circuitos de un aparato eléctrico tienen una simetría determinada y por tanto tienen unas propiedades muy establecidas. Pero al pasar corriente eléctrica a través de ellos, hace que los átomos se vayan moviendo muy poco a poco rompiendo la simetría que había al principio. En el momento en que pierden la simetría inicial, sus propiedades varían, por lo que no sirven para lo que fueron fabricados. Todos lo aparatos eléctricos tienen una vida determinada más allá de que nosotros se la acortemos. Por eso si a un frigorífico le abrimos la puerta unas 12 veces al día, eso supone unas 4300 veces al año y al cabo de diez años le habremos abierto la puerta unas 45000 veces. Y este tipo de aparatos parece ser que están preparados para una vida de este tipo. Los fabricantes lo tienen muy claro. No compensa que dure más de ocho o diez años algo.
Si según dicen muchos expertos biólogos, la evolución de las especies es en gran medida aleatoria y tiende a que haya extinciones sin razón clara, sabiendo que la naturaleza es sabia, por qué no va a fallar infinidad de aparatos construidos por el hombre?.
Un día la televisión deja de funcionar. No le hemos dado un golpe, no se ha caído al suelo ni se ha mojado. Simplemente un día deja de funcionar. ¿Por qué ocurre? Más allá del análisis del técnico, esto ocurre por una razón de simetría. Los materiales tienen distintas propiedades. Así, el cobre es buen conductor de la electricidad mientras el plástico no y el diamante es más duro que el cuarzo. Las propiedades de los materiales dependen en gran medida de la simetría de éstos. Es decir, de cómo estén situados los átomos en la estructura global del material. Los cables que forman los circuitos de un aparato eléctrico tienen una simetría determinada y por tanto tienen unas propiedades muy establecidas. Pero al pasar corriente eléctrica a través de ellos, hace que los átomos se vayan moviendo muy poco a poco rompiendo la simetría que había al principio. En el momento en que pierden la simetría inicial, sus propiedades varían, por lo que no sirven para lo que fueron fabricados. Todos lo aparatos eléctricos tienen una vida determinada más allá de que nosotros se la acortemos. Por eso si a un frigorífico le abrimos la puerta unas 12 veces al día, eso supone unas 4300 veces al año y al cabo de diez años le habremos abierto la puerta unas 45000 veces. Y este tipo de aparatos parece ser que están preparados para una vida de este tipo. Los fabricantes lo tienen muy claro. No compensa que dure más de ocho o diez años algo.
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