En un día como hoy poco se puede decir. La impotencia ante una tragedia como la ocurrida en Barajas hoy muestra lo pequeño y frágil que es el ser humano tras haber llevado él solito su tecnología a límites inimaginables. Un fallo tras horas y horas de comprobaciones técnicas hace que en décimas de segundo llegue el horror a un habitáculo sin escapatoria que va a una velocidad ya incontrolada y... más de un centenar de vidas repletas de ilusión, previa a disfrutar de unos días de vacaciones merecidas. se apaguen en una muerte horrible. No puedo imaginar esas décimas de segundo en plena explosión, gritos de horror, de agonía y de impotencia y minutos que se tornan en horas hasta que llegan las ayudas. Hoy ha ocurrido en un avión en España, mañana puede pasar en un tren en otro país. Lo cierto es que aunque es muy duro asimilar estos varapalos, incluso sin que las vícitmas sean afines a ti, debemos intentar dirigir nuestras emociones y saber que el monstruo que el hombre ha diseñado llamado tecnología, cuenta con grandes avances y lujos pero también cuenta con el posible trago del error mecánico o humano.
2 comentarios:
Cuando suceden accidentes de este tipo, hay gente que dice que volar es para los pájaros... pero, como tú bien dices, puede pasar en un tren, o en un ferry... la cuestión es que hay que seguir mirando adelante, es lo único que les queda a las familias de los fallecidos.
El transporte aéreo es el más seguro aunque ,cuando hay uno, las víctimas siempre están sentenciadas.
Los motivos los sabremos pronto. Yo no me mojo. Los mecánicos se la juegan, en sus herramientas y lso pilotos no se quieren morir heroicamente.
Creo que , ahora, saldrán a la luz cosas que se dijeron ("poner en peligro el pasaje") y que tal vez por impactar a quienes leían la carta, no se deberían haber dicho tan alegremente...me refiero a la carta del sindicato a los dueños de la compañía aérea. Los protocolos de seguridad no se pueden saltar porque lo diga nadie y no creo que se arriesgue nadie a saltárselos
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