Lo cierto es que el deporte solo debería haberse inventado exclusivamente con fines recreativos y saludables pues cuando el deporte va más allá de otros intereses en la mayoría de los casos acaba desvirtuado.
La actividad física y el deporte deberían ir siempre estrechamente relacionados con la calidad de vida. Una buena prevención médica y fisiológica unida al disfrute del deporte aumentarán sin límites la calidad de vida. La asistencia a un buen espectáculo deportivo como mero espectador puede que ayude también en esa calidad de vida desde el punto de vista social pero nunca desde las perspectiva fisiológica. A todo esto nos encontramos con varios conceptos: mejora fisiológica, recreación y prevención.
Si esto se cumple estamos en lo correcto?. Jugar a la wii o a la play con el “eye toy” donde no paras de moverte, torear unas vaquillas, ir a bailar a una discoteca, tirarte al suelo a jugar con tu perro o simplemente trabajar en labores de jardinería es actividad física?. Todas ellas cumplen con los conceptos predeterminados pero ninguna de ellas son consideradas deporte. Una de las grandes controversias a lo largo del tiempo ha sido la elaboración de una definición de deporte que aclare de una vez por todas si el golf es depote, si la tauromaquía es deporte o si el ajedrez es deporte. Yo me quedo con cualquier actividad físico-recreativa que este reglamentada y disponga de un mínimo de carácter competitivo bien a nivel personal (salir a correr para mejorar uno mismo) o bien colectiva (ganar a un rival) y que siempre favorezca a la salud y desarrolle la calidad de vida del individuo. Hacer una marcha, montar en quad o a caballo si mejora tu calidad de vida y te ayuda a estar sano, bienvenido sea.Ante tantas contradiciones que puede conllevar cualquier análisis del “jugo” deportivo aparece la gran contradición del este ámbito: DEPORTE Y DOPING (engañar para entretener más).
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