Esta vida da muchísimas vueltas, y todas llevan al mismo sitio, unas vueltas que te marean y se apoderan de ti, que te poseen, que te hacen cambiar de opinión sobre cosas que tenías más que decididas. Cosas que no esperas en otras épocas que harías ni en sueños y que realizas o cosas que piensas que siempre harás o pensararás y que al cabo de un tiempo ni te acuerdas de ellas. Gente que tienes al lado que forman parte de tu entorno y que pueden convertirse en desconocidos con el paso del tiempo. Ese refrán que dice "...de este agua no beberé" es muy aplicable, ahora bien, siempre están (estamos) los "cabezones" o los orgullosos que por más que es evidente algo seguimos "...erre que erre" o "...en sus trece". Quién me iba a decir a mi hace 30 años que sería profesor de educación física, entrenador de fútbol, entrenador de atletismo, tutor de primero de la ESO, presidente de mi comunidad de vecinos y padre de familia. Las vueltas que da la vida cuando yo de pequeño quería ser médico radiólogo, no me gustaban los profesores y nunca pensé en ser ni padre ni madre de nadie. Quizá un mínimo detalle o una pequeña decisión cambia el futuro de cada individuo como en la película DOS VIDAS EN UN INSTANTE.
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